¿Cómo viven las personas el espacio y el entorno que habitan? ¿Cómo lo transforman mentalmente? ¿Cómo lo recuerdan? ¿La disposición de un espacio debe generar un determinado resultado en el comportamiento del individuo?

El equilibrio armónico de la energía personal con la del entorno, produce crecimiento personal en el más amplio sentido de la palabra. Este se refleja en todos los aspectos de nuestras vidas tales como la salud, las relaciones familiares, las de orden afectivo y profesional, en los negocios, las finanzas etc. Existen alternativas para lograr que el lugar donde se vive, trabaja o simplemente se descansa sea equilibrado y armónico, es así como el Feng Shui una filosofía milenaria que estudia la influencia del paisaje, de las orientaciones, de la distribución, forma y color de las construcciones sobre la vitalidad de sus ocupantes es una herramienta efectiva para lograr el equilibrio de los espacios.